Hace 4 años, a 72 horas de abrirse los colegios electorales, se produjo un golpe de Estado en España. Un golpe de Estado diseñado para cambiar el rumbo de los acontecimientos que se preveían -una victoria del Partido Popular rozando la mayoría absoluta- y poner a José Luis Rodríguez Zapatero como presidente de España.
Pero por encima de la política, 192 personas fueron vilmente asesinadas, y más de 1800 heridas en un atentado que nos conmocionó a todos.
Cuatro años después, tras un turbulento juicio primero político -en la comisión del 11M- y después un más turbulento proceso judicial en la Casa de Campo, se condenó a responsables de formar una célula islamista y robar dinamita, pero ninguno de los condenados lo fue por poner las bombas o por organizar la masacre.
Mañana, cuando por la mañana se encienda el radio-despertador, seguro que muchos recordaremos aquella horrible fecha.
Por esos 192 muertos, por esos 1800 heridos y por 45 millones de ciudadanos engañados, el domingo votaré a Mariano Rajoy. Para que los terroristas nunca puedan condicionar el gobierno de España. En 2004 lo hicieron sobre la población, con el miedo que provocaron esos atentados, y en esta legislatura lo han hecho sobre el gobierno, con la aquiescencia de quien todos sabemos.
Porque QUEREMOS SABER LA VERDAD de aquel horrible día, porque no me creo que un morito veinteañero traficante de drogas viniese en un coche robado de Madrid a Asturias en pleno temporal de nieve por la autopista, robara 200 kilos de explosivos de una inóspita mina en los montes de mi tierrina y se fuera dándose un paseo por Burgos con multas de velocidad incluidas en un puerto con cadenas, y todo ello sin dormir un minuto.
Mariano Rajoy, votaré por ti. No nos falles a los que QUEREMOS SABER LA VERDAD.
Pero por encima de la política, 192 personas fueron vilmente asesinadas, y más de 1800 heridas en un atentado que nos conmocionó a todos.
Cuatro años después, tras un turbulento juicio primero político -en la comisión del 11M- y después un más turbulento proceso judicial en la Casa de Campo, se condenó a responsables de formar una célula islamista y robar dinamita, pero ninguno de los condenados lo fue por poner las bombas o por organizar la masacre.
Mañana, cuando por la mañana se encienda el radio-despertador, seguro que muchos recordaremos aquella horrible fecha.
Por esos 192 muertos, por esos 1800 heridos y por 45 millones de ciudadanos engañados, el domingo votaré a Mariano Rajoy. Para que los terroristas nunca puedan condicionar el gobierno de España. En 2004 lo hicieron sobre la población, con el miedo que provocaron esos atentados, y en esta legislatura lo han hecho sobre el gobierno, con la aquiescencia de quien todos sabemos.
Porque QUEREMOS SABER LA VERDAD de aquel horrible día, porque no me creo que un morito veinteañero traficante de drogas viniese en un coche robado de Madrid a Asturias en pleno temporal de nieve por la autopista, robara 200 kilos de explosivos de una inóspita mina en los montes de mi tierrina y se fuera dándose un paseo por Burgos con multas de velocidad incluidas en un puerto con cadenas, y todo ello sin dormir un minuto.
Mariano Rajoy, votaré por ti. No nos falles a los que QUEREMOS SABER LA VERDAD.
1 comentario:
Joer, que fuerte considerar un atentado terrorista con un golpe de estado, que fuerte. Hay gente que necesita urgentemente piscoanalizarse...
Un saludo.
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